La red eléctrica del NEM se está volviendo más vulnerable a perturbaciones a medida que la tecnología basada en inversores reemplaza a la generación síncrona. La disminución de la fortaleza del sistema y la caída de la inercia están elevando los costos para nuevos proyectos y generando incertidumbre para los desarrolladores. Las baterías con capacidad de formación de red (GFM) están demostrando ser más que una solución técnica; también están desbloqueando nuevas fuentes de valor para los desarrolladores. Al evitar cargos por fortaleza del sistema y asegurar contratos de soporte de red, los sistemas GFM acceden a flujos de ingresos que las baterías seguidoras de red (GFL) no pueden alcanzar.
Para una introducción a la formación de red en el NEM, lee nuestra explicación aquí.
Esta segunda parte de la serie sobre GFM explora cómo las baterías capturan valor a partir de la formación de red. Cubre acuerdos de soporte de red, la evitación de cargos por fortaleza del sistema, referencias internacionales y el papel que tendrá GFM en el futuro de la red del NEM.
Resumen ejecutivo:
- Los inversores GFM permiten a las baterías acceder a ingresos fuera del mercado. Los contratos de soporte de red y la evitación de cargos por fortaleza del sistema están surgiendo como fuentes clave de ingresos.
- Los nodos de fortaleza del sistema actúan como señales de ubicación para las baterías GFM. Las áreas con altos precios y requisitos de fortaleza del sistema guían a los desarrolladores hacia donde las baterías GFM son más valiosas.
- Los desarrolladores pueden evitar hasta $13.5k/MW/año en cargos por fortaleza del sistema instalando inversores GFM. Las baterías GFM pueden remediar su impacto en la red local, evitando así estos cargos.
- Referencias internacionales para contratos de soporte de red se valoraron en $16.9k/MW/año. Las licitaciones Stability Pathfinder de Gran Bretaña (GB) ofrecen un referente útil para los contratos de soporte de red en el NEM.
- Las baterías con formación de red pueden brindar soporte al sistema mucho más barato que activos dedicados como los condensadores síncronos. Las baterías fueron contratadas por $9,960/MVA/año, comparado con $77,275/MVA/año de los condensadores síncronos.
Los ingresos fuera de mercado impulsan a las baterías a adoptar inversores de formación de red
La formación de red está convirtiéndose en el estándar para las nuevas baterías que entran al NEM. Las baterías GFL existentes también se están sumando a esta tendencia al actualizar sus inversores para convertirse en GFM, siendo el ejemplo más destacado la expansión de Hornsdale Power Reserve en 2020. Hasta ahora, las subvenciones, los contratos de soporte de red y la evitación de cargos por fortaleza del sistema (SSC) han impulsado este cambio.






